Hace poco más de una semana, David Nalbandián, en ese momento 74 del mundo, había derrotado al serbio Tipsarevic, en ese momento 10 del mundo, en la tercera ronda del Masters 1000 de Indian Wells, en EEUU, por 3-6, 6-3 y 6-3.
Una semana después, el serbio, nueve del ránking ATP, tenía su revancha ante el tenista de Unquillo, Córdoba -hoy en el puesto 50-, por la segunda ronda del ATP Masters 1000 de Miami, también en EEUU. Y no desaprovechó la chance. Con un 7-5 y 6-3, dejó afuera a uno de los padalines de la ilusión argentina de Copa Davis.
Un primer set muy parejo. Con dos tenistas muy afilados con sus servicios y regalándole un gran show a los asistentes al Estadio Grandstand. Buenos puntos de fondo, oportunidades de subir a fenir a la red, y todas las variantes para dos jugadores que en circunstancias de ránking normales deberían encontrarse mucho más tarde en el fixture. Y se sabía que el que mejor aprovechara sus chances lograría el set. En el game 11, Nalbandian, tuvo dos chances para igualar en 6 en el primer set, pero no pudo aprovecharlas ante un Tipsarevic, muy afilado. 7-5.
El segundo set. arrancó mejor David, con un quiebre rápido para adelantarse 2-0. Pero en el sexto game, el serbio se recupera, rompiendo el saque de David para 3-3. A partir de allí, fue todo del 9 del mundo, aprovechando cada error del argentino, que a partir del quiebre estuvo totalmente fuera de foco. Mal día para el cordobés que tiene la mirada fija en la serie de Copa Davis que arranca el 6 de abril.
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