En el Masters 1000 de Roma, jugado sobre polvo de ladrillo -el tradicional, sin tinturas ni pinturas-, el español Rafael Nadal, ATP 3, derrotó al serbio Novak Djokovic, número 1 del mundo, por 7-5 y 6-3, y se consagró campeón por 6ta vez en su carrera. De esta manera, el mallorquín recupera el puesto número 2 del ránking mundial, perdido a manos del suizo Roger Federer hace tan sólo una semana.
El español arrancó el primer set con un quiebre en el quinto game, para tomar una ventaja de 3-2 y el saque, pero no pudo mantener la ventaja y el número 1 del mundo puso las cosas iguales con un quiebre. De allí en más, y cuando todo parecía encaminarse a un tie break, Nadal logró un nuevo quiebre en el game once, y con su servicio -esta vez sí- pudo llevarse el game y set 7-5. Se vio sobre el final del set un Djokovic enojado, que rompió la raqueta y se llevó un "warning" -un advertencia previa a la quita de puntos-.
La tranquilidad de Nadal contrastaba con el mal ánimo del serbio. Y el español aprovechó para arrancar la segunda parte con el tercer quiebre a su favor del partido. Un partido que ya parecía tener un ganador. No por la diferencia real en el juego de uno y otro. Sí por la diferencia de concentración. Y con el partido 3-5 y su saque, el serbio volvió a fallar , y el cuarto quiebre de "Rafa" fue el cierre del juego, el set y el partido 6-3.
Nadal vuelve al segundo lugar del podio en el Abierto de Roma, el último torneo grande de polvo de ladrillo antes del Grand Slam de Roland Garros -el torneo más importante de la especialidad-.
No hay comentarios:
Publicar un comentario