En el mediodía del jueves 10 de enero en Australia -la madrugada en la Argentina-, continuó la etapa clasificatoria para el Grand Slam Australian Open, certamen que se disputa sobre cancha dura y reparte 30 millones de dólares en premios y puntos para los circuitos masculino y femenino.
Hubo una buena noticia para el tenis argentino y dos malas.
La buena vino del lado de los varones. El porteño Diego Sebastián Schwartzman, 20 años y 179 del ránking mundial. Por la segunda ronda de qualy, Schwartzman eliminó en sets corridos al italiano Thomas Fabbiano, ATP 263, por un doble 6-4.
En la ronda final de qualy, el joven argentino se medirá ante el israelí Amir Weintraub (196), que dejó fuera de competencia al moldavo Radu Albot (220) 6-7 (8-10), 6-4 y 6-0. No hay antecedentes de encuentros entre ambos tenistas. De ganar, Schwartzman estará por primera vez en el cuadro principal de un Grand Slam.
Las malas vienen por el lado de las chicas, ya que tanto Paula Ormaechea (Sunchales, Santa Fe, 141) como María Irigoyen (Tandil, Buenos Aires, 210) quedaron afuera del certamen.
Ormaechea, 21ra preclasificada, enfrentó a la ucraniana Lyudmyla Kirchenov (225). Luego de ganar el primer set, no pudo mantener el nivel y cayó por 3-6, 7-5 y 8-6.
Irigoyen no tuvo mejor suerte. La australiana Irina Rodionova (248) le acortó la estadía con un 6-1 y 6-4. Y, de esta manera, no quedan más mujeres argentinas en Melbourne.
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